#30DeEnero Comunicación básica con las hijas y los hijos en edad escolar

La violencia y el acoso escolar son problemas graves que afectan a estudiantes de todas las edades y en todo el mundo. Se manifiesta de diversas formas, desde peleas físicas y bullying hasta amenazas y acoso en línea. Estos comportamientos tienen consecuencias graves para la salud mental y física de los estudiantes afectados, así como para el rendimiento académico y el bienestar general de la escuela.

Bullying

Uno de los problemas más comunes relacionados con la violencia y el acoso escolar es el bullying, que se refiere a cualquier comportamiento intencionalmente dañino o hostil hacia un estudiante o grupo de estudiantes. El bullying puede es el acoso físico, verbal o en línea. El acoso en línea, también conocido como ciberacoso, se refiere al uso de medios digitales para acosar a otros estudiantes.

Consecuencias en la salud mental

La violencia y el acoso escolar no solo afectan a los estudiantes directamente involucrados, sino también a sus familias y al personal de la escuela. Pueden causar problemas de salud mental, como ansiedad y depresión, y pueden afectar negativamente el rendimiento académico y el bienestar general de los estudiantes. En muchos casos la falta de comunicación del estudiante con sus padres le orillan a cometer actos en contra de su propia integridad.

Políticas escolares

Para abordar la violencia y el acoso escolar, se han implementado políticas y programas para prevenir y tratar estos problemas. Se incluye la formación del personal, la sensibilización de los estudiantes y la colaboración con las familias y la comunidad. Es importante también contar con un protocolo claro para manejar las situaciones de violencia y acoso que se presenten, y contar con un equipo de apoyo que pueda brindar ayuda a los estudiantes afectados.

Buscar ayuda

Además, es fundamental que los estudiantes sepan que pueden buscar ayuda y apoyo si son víctimas de violencia o acoso escolar. Los centros escolares se esfueran en promover un ambiente seguro y respetuoso para todos los estudiantes, y que se tomen medidas para prevenir y abordar la violencia y el acoso escolar de manera efectiva.

En Querétaro tenemos casos muy fuertes que se han enfrentado y que quedan en la memoria colectiva como algo que no queremos que vuelva a ocurrir. El desprecio con el que actuaron contra Juanito, no se nos olvida.

Y no está por de más explorar la actitud de nuestros hijos, y comunicarnos con mayor frecuencia preguntando sobre el ambiente en su escuela. Cualquier actitud esquiva podría ser un síntoma y tal vez el descubrirlo a tiempo evite un problema mayor