El comandante de Bomberos, José Luis Peña Álvarez dio a conocer que el Instituto Mexicano del Seguro Social incautó dos camiones a la delegación de Amealco, esto por un supuesto vacío legal.
“En estas condiciones y debido al vacío legal existente en esta materia, el Instituto Mexicano del Seguro Social, subdelegación en esta ciudad, fincó crédito fiscal reclamando el pago de cuotas obrero-patronales, a cargo de la asociación, al interpretar que los bomberos voluntarios son trabajadores de la asociación y deben estar inscritos en el régimen obligatorio del instituto”, dijo.
En rueda de prensa en el municipio de San Juan del Rio, indicó que Prevención y Servicio A.C. es una asociación civil sin fines de lucro, autorizada para prestar el servicio público de bomberos en el municipio de Amealco y sus comunidades, así como en poblaciones cercanas de los estados de Querétaro, Michoacán y Estado de México.
Mencionó que los ingresos para el sostenimiento de la asociación y de los bomberos voluntarios que la integran, proviene de los recursos otorgados por el Gobierno del Estado y por las donaciones que, de manera voluntaria y altruista, otorgan personas físicas y morales particulares.
Agregó que bajo estas condiciones, la asociación busca en la medida de su capacidad económica, retribuirles económicamente a los bomberos voluntarios por sus servicios, sabedores que merecen más y mejores condiciones económicas y laborales para el desempeño de dicho servicio.
“Se ha constituido como garantía del pago, dos camiones para el combate de incendios. Ello en virtud de que se considera por nuestra parte, que si bien es verdad que los bomberos voluntarios deben ser sujetos de la seguridad social, también es cierto que, al tratarse de un servicio público, es decir, un servicio que debe ser prestado por el Estado o por el municipio, debe ser alguna de estas entidades quienes se encarguen de proveer dicha seguridad social”, apuntó.
Detalló que dicha asociación se ha dado a la tarea de buscar el apoyo correspondiente de las autoridades municipales, estatales y legislativas federales, a efecto de visibilizar el problema, y de sensibilizar la magnitud de este.
“Tenemos resultados alentadores en algunos casos, no en todos, pues mientras algunas autoridades no han mostrado empatía, otras más nos han abierto las puertas para acompañarnos en las gestiones a realizar frente el Instituto, al mismo tiempo que se trabaja en crear el marco legal que proteja esta digna labor”, expresó.
Comentó que el objetivo final implica la voluntad de distintas autoridades y niveles de gobierno, y que esto se trata de un trabajo largo y complicado para modificar varias de las leyes, y crear, quizá otras, o bien incluir capítulos completos en las ya existentes, que reglamenten el servicio público de bomberos, no solo para unificar criterios operativos y administrativos, que acerquen a la profesionalización del servicio, sino también que otorguen justicia a quienes de manera voluntaria y altruista arriesgan su integridad, protegiendo bienes fundamentales de otras personas, como lo son la salud, el patrimonio, y la vida.
“Por lo pronto, bomberos voluntarios de Amealco, sigue y seguirá prestando este servicio en las actuales condiciones, hasta en tanto sea humana y materialmente posible hacerlo”, concluyó.