Diego Vega Urquiza, director de Mantenimiento de Infraestructura de la Secretaría de Servicios Públicos del municipio de Querétaro confirmó que el árbol que se encuentra en el Jardín Corregidora será talado porque ya está seco.
“El árbol que está a un lado del árbol de la Amistad es una acacia que está en el Jardín Corregidora y son árboles que no son de la zona”.
Reconoció que clima extremo que se ha registrado en los últimos tres años fue acabando poco a poco con él.
“No le ha ayudado el clima y debido a que los últimos dos o tres años han pegado las ondas de calor, uno de ellos murió, el árbol de la Amistad está bien y de ahí en fuera no tenemos reportes de árboles en mal estado”.
Refirió que las cuadrillas que hace el riego y poda de los árboles revisan constantemente y en caso de que exista algún árbol afectado se atiende por parte del vivero municipal.
“El árbol que murió es una acacia con edad de 60 años de antigüedad, era de 22 metros de alto y 80 centímetros de tronco, presentó una deshidratación debido al cambio climático”.
Detalló que como estos árboles ya son tan grande toman el agua del subsuelo y de la atmósfera y el riego que se les da no les ayuda mucho.
“Sin embargo, estuvimos regando los árboles de la zona, pero no son árboles de este clima y los últimos años, por el calor que ha sido muy extremo, se vio afectado”.
Aunque por el momento no han talado esta acacia, si está programa para cortar y plantar otro y pese a los días en los que ha habido viento, no se corre el riesgo de caer y, por el contrario, una vez que se tale será plantado otro en su lugar.
De acuerdo con el reporte, este árbol presentó deshidratación total con retracción de tejidos internos por falta de flujo continuo y desprendimiento de corteza, además tiene infestación de hongo Caliciopsis brevipes el cual forma parte de su biota natural.
“Este hongo prolifera al encontrare el árbol debilitado, principalmente por el cambio climático ya que es de clima frío y húmedo, por la delimitación de sustrato, por el entorno que lo rodea y por el estrés urbano que sufre, otro signo es la segregación de resinas es muestra de defensa, al igual que la formación de tumores en las ramas, y al no tener hojas que le permitan fotosintetizar, el árbol se convierte en hospedero de plantas hepifitas e insectos oportunistas, todo en su conjunto provocaron la muerte del árbol, por lo que se recomendó su retiro”.
Vega Urquiza confirmó que los tres árboles que se podaron en la zona de Álamos Segunda Sección contaban con el permiso para su retiro por lo que en la zona se colocarán 15 árboles más pues de acuerdo con el reglamento por cada uno que se retira se deben colocar otros cinco.
“Con base a la norma técnica ambiental hubo una petición del 19 de julio en donde la Dirección de Desarrollo Urbano autoriza cortar tres árboles por lo que la Secretaría de Servicio Públicos del municipio dio seguimiento al derribo de dos árboles picus y un fresno los cuales fueron repuestos en vivero y cumpliendo con el papeleo necesario”.
Explicó que se tuvo un acercamiento con la presidenta de los Colonos de Álamos y se acordó establecer una mesa de trabajo con los vecinos y posteriormente realizar un recorrido para ver en dónde se pueden plantar estos 15 árboles y de ser necesario sembrar más.
“Haremos recorridos en la colonia para ver las necesidades de árboles que se tienen en la zona y plantar los que sean necesarios y que sean endémicos para que tengan un buen desarrollo, ya está contemplado que por cada árbol que se tale se sustituyan cinco, o sea, serán 15 árboles los que se planten en la zona, serán árboles grandes de entre 3 y 4 años de edad, de 3 pulgadas y de 4 a 5 metros de alto”.