• La propuesta de reforma para el aumento de 15 a 30 días de salario en el pago de aguinaldo podría generar insuficiencia presupuestal en las empresas, señala.
• La iniciativa para disminuir la jornada laboral de 48 a 40 horas semanales, hace imposible de cumplir para las micro, pequeñas y medianas empresas por los costos operativos que implicaría, asegura.
Iniciativas como el aumento en 15 a 30 días de salario en el pago de aguinaldo o la iniciativa en la disminución de la jornada laboral de 48 a 40 horas semanales, pone en inminente estado de indefensión a las empresas, muy en especial a las micro, pequeñas y medianas, señaló Esaú Magallanes Alonso, Presidente de la CANACINTRA, Delegación Querétaro, quien aseguró que iniciativas con tintes populistas vendrían a poner en verdadero predicamento a los empresarios por la carga presupuestaria que representaría.
El Presidente de los industriales queretanos, destacó que los beneficios para el trabajador son minúsculos ante el riesgo que significaría el recorte de plazas laborales, y en el peor de los casos, el cierre de las unidades de trabajo, dijo “el escenario no es favorable, pues a la generación de empleos bien remunerados, como es el caso de Querétaro en donde el salario está por encima de la media nacional, se estarían sumando los costos para cubrir las prestaciones, lo que se traduciría en una contracción del empleo”, mencionó.
Esaú Magallanes confió en que los legisladores analicen a profundidad las repercusiones de que modifica el artículo 87 de la Ley Federal del Trabajo, en materia de pago de aguinaldo, dijo, “Como empresarios observamos que algunos de los legisladores no tienen un análisis general de las repercusiones, por ejemplo para las MiPymes, por lo que es muy importante hacer una evaluación profunda ya que los riesgos contables para los empresarios al no poder subsanar los costos llevaría a despidos e inevitablemente a cierres”.
El también Vicepresidente de Grandes en la CANACINTRA Nacional, mencionó que la reforma para disminuir la jornada laboral de 48 a 40 horas semanales, también genera incertidumbre en el sector ya que es imposible de cumplir para las micro, pequeñas y medianas empresas por los costos operativos que implicaría, al respecto comentó, “Necesitamos reevaluar la iniciativa a través de una comunicación abierta, informada y generar desarrollo activo entre los sectores para resolver y prevenir posibles problemáticas para la economía y el empleo a nivel nacional”.
Magallanes Alonso, mencionó que algunas de las repercusiones que se vislumbran ante las iniciativas son: –dijo—“el desempleo paulatino y perjudicial para inversiones, la existencia de un peligro latente en que el cambio de la jornada laboral, lejos de atraer bienestar, formalizará el cierre de empresas, despidos o interferencia con inversiones, un 26.6 por ciento menos de horas de trabajo a la semana, se esperaría que el cierre de aquellas Mypesen un lapso de tiempo de 6 a 12 meses, lo que implicaría una reducción laboral, considerable, entre otras”. Finalizó.