El obispo Víctor Aguilar Ledesma, presidente de la Dimensión de los Laicos del Episcopado Mexicano, convocó a más de 40,000 jóvenes peregrinos de toda la nación a involucrarse activamente en las próximas elecciones de México.
Durante la 41ª edición de la Marcha Nacional Juvenil, el obispo de Celaya destacó la urgencia de participación juvenil por la patria, enfatizando la importancia de que la Iglesia y la nación actúen unidas.
El evento, que incluyó un ascenso al Cerro del Cubilete, se caracterizó por la energía de los jóvenes, expresada a través de cánticos y rezos. Andrea G. Pineda Perea, presidenta de Juventud TyE, subrayó la importancia de una participación electoral genuina y desinteresada, solicitando un trato equitativo de las autoridades y las diferentes corrientes políticas.
En su discurso, Aguilar Ledesma hizo hincapié en la defensa de los derechos fundamentales, especialmente la libertad religiosa. Afirmó que “los derechos nacen de la naturaleza humana”, y que el gobierno debe reconocerlos, no otorgarlos. Esta declaración resuena con la actual preocupación sobre la libertad de expresión religiosa en el país.
Mons. Alfonso Cortés Contreras, arzobispo de León y presidente de la Pastoral Educativa del Episcopado Nacional, también abordó a los jóvenes, reconociendo los desafíos y las profundas fracturas que enfrenta la nación, pero también recordando las bondades y el heroísmo inherentes a México.
Los líderes de la Iglesia y los jóvenes coincidieron en la importancia de la libertad religiosa, no solo de culto, sino que también permita expresiones públicas. Además, reafirmaron su compromiso con el país, alineándose con la fidelidad y la sinodalidad promovidas por el Papa Francisco.
El evento cerró con un llamado a acompañar a la juventud en su búsqueda de paz, oportunidades, educación, salud y empleo, resaltando la relevancia de la juventud en el futuro de México.