ES EL PEOR PRESUPUESTO, EN EL PEOR MOMENTO: SONIA ROCHA

Tras un análisis inicial del paquete económico 2021 que fue entregado el pasado martes en la Cámara de Diputados por el Ejecutivo Federal, la Diputada del PAN por el 1er Distrito de Querétaro, Sonia Rocha Acosta, consideró que de aprobarse en los términos en los que fue presentado, sería el peor presupuesto, en el peor momento de la historia reciente de México.

Como secretaria de la Comisión de Presupuesto y Cuenta Pública de la Cámara de Diputados, la legisladora señaló que se trata de un presupuesto que olvida y no atiende a la realidad que padecen todos los sectores productivos del país, pero sobre todo, que ha afectado a las familias mexicanas sin distinciones y por el contrario dedica todos los recursos a los caprichos del presidente como lo son el Tren Maya, la refinería de Dos Bocas y el aeropuerto de Santa Lucía.

Por este motivo, señaló que las y los diputados del PAN iniciarán de inmediato los trabajos para buscar realizar las modificaciones pertinentes al proyecto.

“Nos llega en el peor momento, el peor presupuesto de la historia. Es un paquete económico que se olvida de todo: Se olvida que estamos viviendo una situación de crisis provocada por las malas decisiones gubernamentales y agraviada por la pandemia de coronavirus que ha puesto al país en condiciones que requerían una atención especial”, destacó.

Cabe destacar que el proyecto de presupuesto neto para el 2021 es de 6 billones 296 millones de pesos, mayor en 188 mil millones de pesos al presupuesto aprobado para este año, sin embargo, esto representa menos ingresos reales (-0.3%) si se descuentan los ingresos que provendrán de la deuda pública, por lo que no hay un equilibrio, ni mucho menos finanzas sanas.

El paquete económico no propone una estrategia audaz de reactivación económica para impulsar a los sectores con mayor potencial y que atienda a los efectos de la entrada en vigor del T-MEC y que beneficie la reactivación del Turismo en todo el país y no solo en el Tren Maya que a la fecha no cuenta con todos los permisos de derecho de vía, ni con los proyectos ejecutivos, permisos ambientales y simpatía de la población afectada.

Señaló que la pandemia de Covid-19, solo evidenció la crisis en la que ya estaba el sector salud y a pesar de ello, este paquete económico no aumenta sustantivamente los recursos para solventar esta problemática y propone un incremento insuficiente de 9.2% en términos reales del Ramo 12, incluyendo 33 mil millones de pesos provenientes del Fondo de Protección Contra Gastos Catastróficos del extinto Seguro Popular, los cuales estaban destinados a la atención de enfermedades graves que hoy también están en crisis como el cáncer infantil.

Rocha Acosta destacó que derivado del impacto económico que ha tenido la pandemia en los sectores productivos, se contempla una caída del -2.5% en la recaudación de impuestos, por lo que 5.5 centavos de cada peso que ingresará al gobierno en 2021 provendrán de los impuestos, sin que exista ninguna política pública que beneficie a los trabajadores, ni a los empresarios.

“Es un presupuesto que olvida la salud, que olvida a la educación, que olvida a las mujeres, a los campesinos, que abandona por igual a las familias, a los trabajadores y a los emprendedores y que no es solidario con las micro, pequeñas y medianas empresas”, expresó.

La propuesta del ejecutivo también disminuye en 42 mil 477 millones de pesos la recaudación participable (-1.2% real) respecto del ejercicio 2020, con lo cual los estados y municipios -que son quienes han recibido toda la carga por los gastos de la pandemia- recibirán aún menos recursos.

En materia de transparencia, lamentó que los aprovechamientos de recursos que no está obligado a transparentar el gobierno federal hayan crecido 42.2% respecto al 2020 y asciendan a 152 mil 458 millones de pesos, lo cual ha sido denunciado desde su creación por organismos especializados como una caja chica del presidente.

Por este motivo, señaló que Acción Nacional realizará una propuesta para priorizar el equilibrio fiscal y las finanzas públicas sanas, sin contratar más deuda pública, además de exigir al gobierno federal que se analice la forma de reducir los impuestos a las familias y realizar un esfuerzo por ampliar la base de contribuyentes con el fin de apoyar la economía de los hogares mexicanos y buscar una mayor eficiencia recaudatoria.