Hasta el momento, son dos los partidos políticos que han atendido el llamado del presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, quien los invitó a renunciar a más del 50% de sus recursos por considerar excesiva la cantidad destinada a estos.
Los primeros en pronunciarse, como era de esperarse, fueron los integrantes de Morena, quienes, representados por Yeidckol Polevnsky, manifestaron estar de acuerdo con renunciar al 75% de su presupuesto. Esto debido a que Morena es “un partido austero” que “no hace despilfarros”.
Polvensky también aprovechó la ocasión para pronunciarse en contra de que los partidos reciban estas enormes cifras puesto que hace falta dinero en el sector salud.
El otro partido que aceptó reducir sus gastos fue el Partido Revolucionario Institucional (PRI), quienes, comandados por Claudia Ruiz Massieu, aseguraron estar dispuestos a renunciar al 50% de sus recursos.
No obstante, el presidente informó que le pedirá a Arturo Herrera, titular de la Secretaría de Hacienda y Crédito Público, reunirse con los dirigentes de los partidos y con los consejeros del INE para llegar a un acuerdo que beneficie a todos.
