Seis toneladas de documentación del proceso de revocación de mandato 2022 fueron destruidas por el Instituto Nacional Electoral en el estado de Querétaro.
La documentación se preparó en el mes de septiembre en cada una de las cinco juntas distritales ejecutivas bajo la vigilancia de representantes partidistas y exconsejeros ciudadanos quienes constataron que la documentación estuviera lista para su destrucción mediante procesos de reciclamiento.
Habiendo convocado a representantes de los partidos políticos y consejerías electorales, el 9 de diciembre de 2022, las juntas distritales ejecutivas trasladaron la documentación a la planta de la empresa Kimberly Clark de México S.A. de C.V. en la ciudad de San Juan del Río, Querétaro.