Antorcha, Editorial, Jerónimo Gurrola 16 diciembre, 2020

Pio y Felipa, ejemplos de corrupción Morenista

por Redacción inqro

Por Jerónimo Gurrola Grave


Durante toda su campaña a la presidencia y ya al frente del gobierno, en sus dos años de mañaneras y eventos públicos, sin que venga a cuento, sabedor de que esto fue lo que provocó hartazgo entre los mexicanos, su discurso es sobre corrupción. Que que si dejó en libertad al hijo del Chapo Guzmán, “es por la corrupción”, que van más de 112 mil muertos debido al muy mal manejo de la pandemia, “la corrupción”; si la economía decreció desde 2019 y empeoró con la pandemia, “la corrupción”; si desaparece y recorta programas destinados a los más pobres, “la corrupción”; si inunda a los tabasqueños más pobres para salvar Villahermosa y su proyecto Dos Bocas, “la corrupción”; que se le ocurrió vender y rifar el avion presidencial y no pudo, “la corrupción”… y así, absolutamente todo lo explica por la corrupción.

“Todos los negocios jugosos que se hacen en el país, negocios de corrupción, llevan el visto bueno del Presidente de la República” ha dicho reiteradamente, Andrés Manuel López Obrador, al criticar a quienes formaron parte de las administraciones federales pasadas del PRI, PAN (Prian) les llama despectivamente, o el PRD. Pero haciendo un ligero recuento de los miembros de su gabinete y su partido, el 86 por ciento son expriistas que hoy ocupan puestos desde los más altos niveles: secretarios, subsecretarios, directores, “superdelegados” y gobernadores, empezando por el mismísimo López Obrador, que militó en el PRI a lo largo de 14 años y de allí pasó al PRD de donde saltó a fundar Morena.

Olga Sánchez Cordero, priista, Secretaria de Gobernación y Ministra en el gobierno de Ernesto Zedillo; Héctor Vasconcelos priista nombrado titular de la SRE, quien dejó su lugar a Marcelo Ebrard, también priista y perredista; Rocio Nahle, Secretaria de Energía, ex empleada de PEMEX por 30 años; Manuel Bartlett, Director de PEMEX, ex Secretario Gobernación con De la Madrid y Salinas de Gortari; Ricardo Monreal, Senador, 12 años priista, 6 en el PRD, 5 en el PT y ahora morenista; Esteban Moctezuma, priista, Secretario de Educación, de Gobernación y de Desarrollo Social con Ernesto Zedillo, empleado de Salinas Pliego en TV Azteca; Santiago Levy, Subsecretario de Hacienda con Zedillo y director general del IMSS.

Alfonso Durazo; priista, ex Secretario de Seguridad Pública y precandidato al gobierno de Sonora, y ex Secretario particular de Vicente Fox; Felix Salgado Macedonio, Senador por Morena con 30 años en el PRI de donde pasó al PRD; Napoleón Gómez Urrutia, Senador por Morena, priista por 35 años, acusado por robo de 56 mdd al gremio minero, Tatiana Cloutier, Miguel Barbosa, Cuitlahuac García, y un interminable etcétera de funcionarios y políticos morenistas. De verdad, alguien de los 30 millones de mexicanos que votaron por la multi prometida transformación de México cree que estos y muchos otros depredadores del país, salen huyendo del PRI, PAN o PRD por la corrupción que imperaba en sus partidos y se convirtieron de la noche a la mañana en honestos y virtuosos servidores públicos?

En el doble discurso de Amlo y Morena, encaja muy bien lo dicho por el ministro Chino, Confucio: “Cuando los gobernantes nada más buscan el incremento de su fortuna personal, se verán acompañados de gentes perversas, las cuales se disfrazarán de ministros justos, y el reino estará dirigido por hombres depravados”. ¿Cómo cuando evidencian a Pío cobrando millonarios “moches” con “piquetes de ojo” y toda la cosa para la campaña de López Obrador, se convierten en “aportaciones” para la causa? ¿Cómo, si según el mismo AMLO, todos los negocios jugosos de corrupción que se hacen en el país llevan el visto bueno del Presidente de la República, después de burlarse de quien lo da a conocer, declara olímpicamente que él no sabía que su prima Felipa Obrador, dueña de Litoral Laboratorios Industriales lleva ya varios contratos con Pemex por varios cientos de millones de pesos a pesar de reconocer que estaba enterado desde hace más de un año?

¿Cómo se explica que si todos los negocios jugosos de corrupción llevan el visto bueno del Presidente, sea el Departamento de Justicia de Estados Unidos quien denuncie ante la Corte de Nueva York que la empresa suiza, Vitol, como Odebrecht, haya sobornado a funcionarios de Pemex entre 2015 y 2020, ya gobernada por los honradazos de Morena? Hipocresía pura! No son iguales, su cinismo los hace peores!

jerogurrola@yahoo.com.mx

@jgurrolag1