La delegación Epigmenio González es la más joven, nació en 1994 cuando se reorganizó la ciudad a raíz de su crecimiento, y de la ampliación y ordenamiento de vías rápidas como Bernardo Quintana, 5 de Febrero y carretera federal 57 en su tramo urbano.
El 26 de diciembre de 1994 en sesión de cabildo se aprobó el nuevo nombre de la delegación como Epigmenio González Flores en referencia al héroe insurgente nacido en la ciudad de Santiago de Querétaro a propuesta del entonces cronista Eduardo Loarca Castillo.
Junto con la creación de esta delegación se definieron los nuevos límites de las otras 6 delegaciones, dándole al Municipio su configuración territorial actual. Es la delegación con la población más jóven de la capital, y después de la primera mitad del siglo XX durante el proceso de industrialización de la ciudad, colonias como Las Américas y Lomas de San Pablo fueron de las primeras que atrajeron habitantes que formaron parte de la fuerza laboral de las nacientes fábricas.
Gracias a ello, en esta delegación podemos encontrar talleres mecánicos, torneros, hojalaterías, fundidoras, soldadores, electricistas y una infinidad de oficios que dan servicio a las industrias aledañas. La unidad deportiva Belén, el parque Holland, La Alameda Norte y el Parque Querétaro 2000 son algunas de las opciones de recreación para las familias de esta delegación.
Los orígenes poblacionales de la delegación son al igual que casi todo el Municipio, remotos, los registros más antiguos la colocan como parte de las mercedes reales que se repartieron desde 1550.
Para el siglo XVII sus fértiles tierras posibilitaron la fundación de dos haciendas muy importantes, primero Jurica, la cual fue una de las más grandes en cuanto a extensión de territorios del siglo XVII, y El Salitre, cuya parroquia continúa al día de hoy siendo uno de los principales puntos de reunión de los pobladores de la delegación.
La emblemática comunidad de El Salitre tiene su templo grande desde hace 50 años, aunque su capilla es de 1937; esta zona se destaca por su devoción y solidaridad, pues desde hace más de 70 años en la parroquia se les da de comer a los peregrinos que vienen de otras colonias e incluso de delegaciones como Carrillo y Centro Histórico, compartiendo con ellos nopales, frijoles, tortas, atole y garbanzo.
La parroquia San Pedro Apóstol de San Pedrito Peñuelas es emblema de solidaridad, aquí se ubica un albergue de migrantes que es atendido por voluntarios donde se recibe a personas nacionales y extranjeras provenientes en su mayoría de El Salvador, Guatemala y Honduras en su camino a Estados Unidos.
La casa del migrante fue fundada hace 5 años por el Padre Aristeo Olvera y desde entonces ha llegado a recibir hasta 5 mil 300 personas al año, incluso niños menores de 10 años. La presencia de migrantes en esta delegación no es reciente, sus veredas fueron desde hace siglos ruta de migrantes guerreros, comerciantes o peregrinos de la era teotihuacana, tolteca y mexica, incluso cuando aquí ya había chichimecas y otomies.
Despúes de la conquista, estas mismas rutas forman parte de la génesis del camino real de tierra desde el siglo XVII, y recibió a los viajeros tal y como lo hace hoy. No es casualidad que durante muchos años esta delegación fuera sede del primer aeropuerto que hubo en Querétaro.
La comunidad de San José El Alto también es parte de esta delegación, ahí surgió la tribu de los apaches guerreros de la misericordia, que encomendados al señor de la misericordia, cada tercer sábado de mes los podemos ver danzar por las calles invitando a la gente a valorar y revivir las culturas ancestrales.
En sus fondas podemos encontrar más de 20 estilos de pozole, lo que le convierte también en un atractivo para los queretanos.
