Esta obra poética-narrativa, realizada en el Centro de Medios, fue dirigida por Javier Velázquez y protagonizada también por Luz Zavala.
En las instalaciones del Centro Integral de Medios de la Facultad de Ciencias Políticas y Sociales (FCPS) de la Universidad Autónoma de Querétaro (UAQ), la compañía Navíos Teatro Contemporáneo, realizó la puesta en escena “Erótica marina o las huellas del picahielo”, escrita, dirigida y protagonizada por Javier Velázquez, quien junto con la actriz Luz Zavala, dieron vida a esta pieza inspirada en “Mi vida con la ola”, de Octavio Paz. Poemas de Efraín Huerta, Julio Cortázar, Jaime Sabines, Efraín Bartolomé y una canción Leonard Cohen: ain´t no cure for love.
Con un aforo limitado de espectadores y privilegiando el distanciamiento entre ellos, la obra los transportó hasta la imaginación de tan célebres autores a través de la palabra y las artes escénicas entretejidas por los protagonistas. De acuerdo con Javier Velázquez, director de Navíos Teatro Contemporáneo UAQ, esta es la quinta versión que realiza de este trabajo, donde el mayor reto fue trasladar el texto poético hasta una pieza teatral, la cual presenta desde 1990.
En este sentido, el director expresó que actualmente el quehacer teatral es tan importante como actividades humanas esenciales como ´beber agua´, por lo que trabajar con este bagaje poético es trascendental.
“Más que satisfecho, uno está con un regocijo interno extraordinario porque cuando te sientes totalmente satisfecho empieza la conformidad; yo me declaro un eterno inconforme, pues uno quiere aspirar a más y tocar más el corazón, el pulmón, el cráneo y el ser del público y del actor para que realmente se vuelva imprescindible”, expresó.
La idea esencial del proyecto es hacer del teatro un espacio de experiencia vital, múltiple, diversa, única e irrepetible, en tiempos de la pandemia, horror, paz y angustia. Por esta razón, Velázquez reconoció la importancia de que la Universidad se sume a esta clase de actividades y agradeció a las instancias que los han apoyado.
La música corrió a cargo Ernesto Martínez y la iluminación de Manuel Nieves. Esta obra forma parte del proyecto “Los monólogos de Navíos Teatro Contemporáneo UAQ en tiempos del Covid-19 o cómo reinventar el teatro”.
