¿Qué tienen en común Chappie, Trascender, El Precio del Mañana y ahora Yesterday? Todas son películas que partían con una premisa interesante, pero que el desarrollo de la narrativa diezmó todo el proyecto.
Yesterday es la más reciente película dirigida por Danny Boyle (el mente maestra ganador del Oscar por Quisiera ser millonario, también director de 127 Horasy claro, Trainspotting) y escrita por Richard Curtis (nominado al Oscar por Cuatro Bodas y un Funeral y conocido también por Love Actually, además de la magnífica About Time [Cuestión de Tiempo]). Con esta dupla y un argumento basado en la música de una de las agrupaciones más influyentes de la historia, todo pintaba para salir a la perfección. ¿Qué pasó entonces?
Jack Malik es un músico fracasado que cuando está a punto de tirar la toalla, un milagro le acontece y resulta que es la única persona en el mundo que recuerda quiénes fueron los Beatles. Como trama, en realidad suena interesante, aunque un poco predecible, ¿no?
Seguramente, toda persona que haya efectuado la compra de su boleto para esta película esperaba ver algo que rindiera tributo a varias de las canciones más populares del planeta, como lo son Yesterday, HeyJude, Here Comes the Sun, Let It Be, entre muchas, muchas otras. En esto, la película cumple a medias por algo muy sencillo: Himesh Patel, nuestro protagonista, no canta nada, nada bien. Hablemos de él más adelante.
Curtis es ese tipo de guionista que cada vez que anuncia un nuevo proyecto, capta la atención de todos en el medio porque se le conoce como un escritor capaz de crear buen diálogo de la mano de una buena historia. Así que, ¿dónde quedó el Curtis que conocemos? En esta película nos entrega a personajes olvidables, sosos y hasta tontos; ¿por qué Jack no se da cuenta o no toma la iniciativa cuando tiene a una mujer increíble enamorada de él desde hace veinte años? O ¿POR QUÉ EL PERSONAJE DE LILY JAMES SIGUE ENAMORADA DE JACK TRAS VEINTE AÑOS? Pero sobre todo, el argumento deja mucho que desear. Sin entrar en detalles, me acordé de una persona muy sabia con su definición de lo que distingue a una buena película de una mala, y lo cito: “Una buena película cierra todos los círculos argumentales que plantea al inicio; una mala, te deja insatisfecho con ello.” Y muy tristemente concluimos en que esta película, bajo esta definición, es mala.
En cuanto a Danny Boyle, hay que considerar que él había sido elegido por MGM para dirigir la próxima película de James Bond, No Time To Die; pero tuvo que abandonar el proyecto para dirigir esta película. ¿POR QUÉ? ¿Qué potencial vio Boyle en este guion para dejar de lado un proyecto que muchos realizadores ingleses morirían por hacer? Por lo mismo, si no te enteras por medio de esta crítica que este es el director de Quisiera ser millonario, no te darías cuenta porque no tiene ningún material para demostrar todo su potencial. Nada más que agregar, tristemente.
Antes de concluir, platiquemos sobre los personajes.En cuanto a la cuestión física, el personaje de Jack debía ser casteado como alguien de descendencia india pero común y corriente físicamente; literalmente el único requisito es que el actor CANTARA BIEN. Esto es porque la persona elegida iba a tener la responsabilidad de interpretar más de 15 canciones de los Beatles en esta película; y no sé si sea mi incapacidad de detectar un buen oído, pero HimeshPatel, para mí, no canta bien. Pero bueno, quizá no es el mejor cantante del mundo, pero debe tener unos dotes histriónicos innatos, ¿no? Tampoco. El intérprete no logra crear un vínculo con la audiencia, no le crees que esté viviendo el sueño de una estrella de rock y no lo vuelve memorable. Lily James cumple, pero por el desarrollo que se le da a su personaje desde el guion, puedes considerarla un tanto ridícula. Kate McKinnones rescatable en sus primeras tres escenas, después es insoportable. El personaje de Rocky, interpretado por Joel Fry, más de lo mismo. La participación de Ed Sheeran es muy grata y verlo cantar en pantalla es un deleite, pero quizá con un poco más de peso en su personaje, estaríamos alabando su trabajo aquí.
Si yo fuera un fanático de hueso colorado de los Beatles, me sentiría más capacitado para opinar sobre esto, pero al menos a mí, no me pareció emocionante ninguna canción suya interpretada por Jack; cosa que sí me pasó en Bohemian Rhapsody o Rocketman, por ejemplo (aún sin ser acérrimo fan de Queen o de Elton John). No sé hasta qué punto recomendaría yo Yesterday, ya que para mí, fue una pérdida de tiempo; pero quiero pensar que si alguien busca algo ligero que ver, tanto en el cine como en la televisión o plataformas de streaming, con toques románticos y recordar un puñado de canciones excelentes, quizá esta película pueda interesarte. Si esperas ver algo mucho más espectacular, o una especie de “tributo” a los Beatles, no sé hasta qué punto pueda gustarte esta película. Solo debemos saber que ni Danny Boyle ni Richard Curtis serán recordados por este trabajo, porque tenían una premisa interesante y con mucho potencial, y no supieron aprovecharlo.
Calificación: 4/10.
